7 consejos para leer la Biblia






1° Antes de leer, recoge tus pensamientos. Dios, la verdad eterna quiere dialogar contigo fami­liarmente. ¿Hay un honor más alto que conver­sar con Dios?
2° Luego pide al Espíritu Santo la gracia de entender su Palabra. Piensa que el sacerdote antes de leer el Evangelio de la misa, está obli­gado a rezar la oraciónPurifica mi corazón y mis labios”.
3° No leas demasiado de una vez. La Sagrada Escritura no es una novela. Dios no habla por la multitud de palabras sino más bien mediante la fuerza del Espíritu, infusa en las palabras de la Sagrada Escritura.
4° Después de leer hay que meditar los ver­sículos leídos. En otras palabras: no sólo estudiar el contenido sino prestar los oídos a las inspira­ciones de Dios.
5° Cuando no comprendas lo que lees, consulta las notas añadidas, los comentarios o a un sacer­dote. La Iglesia, y no el lector, es el intérprete de la Sagrada Escritura.
6° Acaba la lectura con una oración y acción de gracias por las luces que Dios te ha regalado.
7° Escribe en un cuaderno cuanto quieras gra­bar en la memoria para leerlo repetidas veces. Así se aumenta la eficacia de la Palabra de Dios.